
Este miércoles se estreno en Disney+, Kun por Agüero, la serie documental que recorre
la vida de Sergio “Kun” Agüero, uno de los íconos más carismáticos y queridos del
fútbol argentino. Dirigida por Fernando Moleznik, la producción tiene seis episodios y se
presenta como un viaje íntimo, contado en primera persona, por los momentos más
importantes de la vida del exfutbolista: desde sus inicios en un barrio humilde del
conurbano hasta su consagración internacional.
La premiere tuvo lugar en el DOT Baires Shopping, donde se realizó una alfombra roja.
El propio Kun fue parte del evento y no faltaron personalidades del fútbol, amigos
cercanos y medios que acompañaron el lanzamiento de esta historia que promete
emocionar tanto a los fanáticos del deporte como a quienes siguen su figura fuera de la
cancha.
El primer episodio funciona como una introducción potente: no solo repasa los hitos
más importantes de su infancia y adolescencia (hasta aproximadamente los 15 años),
sino que construye una narrativa sensible, cercana, donde el Kun no aparece como
estrella, sino como un chico con sueños, con tropiezos, con mucha gente alrededor que
fue clave en su camino. La serie no esquiva la emoción, y pone el foco en su familia, su
salud, su relación con el fútbol desde muy chico y sus primeros vínculos afectivos. Sí,
también está Messi, con quien el vínculo aparece con naturalidad, como una amistad
que se fue tejiendo desde la admiración mutua.
Uno de los grandes aciertos es el tono: mezcla archivos viejos, personales con
testimonios actuales, material nunca visto con entrevistas honestas. El resultado es un
relato que no dramatiza de más, pero tampoco idealiza. El Kun se muestra tal cual es,
con sus códigos, sus jodas, sus silencios. Hay algo muy genuino que se percibe desde
el primer minuto.
Como primer capítulo, deja varias puertas abiertas que generan ganas de seguir:
¿cómo evolucionó su relación con su papá? ¿Qué rol tuvo la presión mediática en su
adolescencia? Todo eso queda insinuado, lo que convierte a este primer episodio en
una base sólida para seguir explorando la vida de un tipo que siempre supo que el
fútbol no era solo un juego, sino también una forma de salir adelante, en equipo.

Kun por Agüero arranca con el corazón puesto en el lugar justo. No hace falta ser
fanático del fútbol para engancharse: alcanza con querer conocer de cerca a alguien
que, con talento y carisma, supo ganarse un lugar entre los grandes.Y mientras el Kun
abre su historia en pantalla, Argentina sigue celebrando a sus ídolos. Porque más allá
de los goles, los títulos y los flashes, lo que queda es el recorrido, las personas, los
sueños que empiezan en un potrero y terminan en el corazón del mundo. Porque si
algo nos enseñó el Kun —y la Scaloneta— es que no importa cuántas veces te caigas,
lo importante es levantarse, volver a intentarlo y dejarlo todo en la cancha.