Oh, Hi! – Cuando el romance se desarma en tiempo real

¿Alguna vez te fuiste con alguien a una cabaña en el medio de la nada pensando que iba a ser un finde perfecto y terminó siendo un quilombo existencial?
Bueno, de eso va Oh, Hi!, la nueva comedia oscura protagonizada por Molly Gordon (The Bear) y Logan Lerman (The Perks of Being a Wallflower), que llega para sacarle el polvo al género romántico con un enfoque más ácido, más real, y por momentos incómodamente graciosos.
La premisa es simple: Iris e Isaac, una pareja recién formada, deciden irse a una escapada romántica en una cabaña en medio del campo. Hay buena vibra, hay vino, hay paisaje… pero también hay silencios incómodos, charlas que no cierran y pequeñas tensiones que empiezan a escalar. Y lo que parecía ser un finde de conexión, se convierte en una especie de campo minado emocional. Oh, Hi! no es una rom-com más, sino una especie de antídoto para el amor idealizado de Instagram.

Dirigida por Sophie Brooks, la peli se mete de lleno en el lado menos glamoroso del vínculo afectivo: los miedos, las proyecciones, la falta de timing. Y lo hace con una estética simple, diálogos afilados y actuaciones que se sienten súper cercanas. La química entre Gordon y Lerman no es tanto de cuento de hadas, sino de esas que son incómodamente creíbles. De esas que te hacen pensar en tus propias “no-citas” que casi terminan mal.

¿Qué es lo que la hace especial?
Que no busca complacer. No fuerza chistes, ni finales felices, ni moralejas. Juega en esa zona gris donde una relación puede ser un refugio o un espejo de todo lo que uno no quiere ver. Oh, Hi! es incómoda, sí, pero también honesta. Y eso, en un género tan gastado, se agradece un montón.
Todavía no tiene fecha confirmada para Argentina, pero ya pasó por Sundance y todo indica que en cuanto se estrene oficialmente va a dar que hablar. Si sos fan de las historias que mezclan ternura con caos, y que no le tienen miedo a mostrar lo feo del amor, agendate este título. Porque a veces, lo más romántico que puede pasar… es sobrevivir juntos un fin de semana.