Preparen los trajes blancos, los Ray-Ban y el cassette de Genesis, Miami Vice vuelve para patrullar las calles de la ciudad a puro estilo ochentoso.

Universal Pictures está desarrollando una nueva adaptación cinematográfica de Miami Vice (o División Miami como la conocíamos por estos pagos), con Joseph Kosinski, director de Top Gun: Maverick, al mando del proyecto. El guion estará a cargo de Dan Gilroy, conocido por su trabajo en Nightcrawler y The Bourne Legacy.
La película busca reintroducir a los detectives Sonny Crockett y Ricardo Tubbs, personajes icónicos de la serie original de los años 80, en una versión actualizada que mantenga la esencia del show original. La serie original, emitida entre 1984 y 1990, se destacó por su estilo visual distintivo, su integración de música contemporánea y su enfoque en la lucha contra el narcotráfico en Miami.
Recordemos también que tuvimos en el 2006 el remake protagonizado por Colin Farrell (Sonny Crocket) y Jamie Fox (Rico Tubbs). Dirigida y producida por Michaell Mann, el productor de la serie original, que venía de hacer un trabajo impecable con la película de Tom Cruise Collateral (2004).
La película tuvo críticas divididas en su momento, pero con el tiempo fue revalorizada como una joyita de culto. Y su banda sonora, sinceramente, es un lujo.

Kosinski, quien recientemente dirigió F1, una película protagonizada por Brad Pitt ambientada en el mundo de la Fórmula 1, continúa expandiendo su filmografía con proyectos que combinan acción y estilo visual. Su experiencia previa en películas como Tron: Legacy y Oblivion sugiere que esta nueva versión de Miami Vice podría ofrecer una visión fresca y moderna de la franquicia.
Aún no se han anunciado detalles sobre el elenco ni la fecha de estreno, pero se espera que la producción comience próximamente. Para quienes crecimos con la serie de Don Johnson, esta noticia nos arranca una hermosa sonrisa de nostalgia.
¿Habrá lugar para un cameo de Don Johnson? Solo Kosinski y Universal lo saben por ahora. Mientras tanto, a nosotros solo nos queda esperar (y cruzar los dedos).
